lunes, 22 de julio de 2013

Caso clínico Pau: Infección de orina y cálculos

Pau es un cachorro cruce de Labrador y Golden Retriever que a sus poco más de tres meses de existencia ya ha superado con éxito una infección de orina que le obstruyó de forma severa las vías urinarias, poniendo en riesgo su vida.

Las infecciones urinarias afectan a muchos perros, especialmente a las hembras. Normalmente las bacterias irrumpen en las vías urinarias desde el exterior, y ascienden por ellas hasta infectar la vejiga urinaria y, en ocasiones, los propios riñones. Los agentes infecciosos, los tumores, los cálculos y una alimentación inadecuada pueden influir en su aparición y evolución. Sin embargo, la aparición de cálculos, afección diagnosticada en el pequeño Pau, es un problema muy poco frecuente en cachorros.

Radiografia de pelvis
Pau llegó a Pets porque su propietaria pensaba que estaba envenenado. Tras analizar el caso, nuestro diagnóstico para el pequeño fue una infección de orina que había causado la aparición de cálculos en la uretra (ver imagen), y ante la posibilidad de que el problema tuviera consecuencias mayores debíamos intervenir rápidamente mediante una sonda que permitiera liberar la orina retenida en la vejiga y limpiar la uretra.

En este punto nos encontramos con que la situación personal de la propietaria de Pau no le permitía afrontar los cuidados veterinarios que requería el perro, por lo que ante una perspectiva más que probable de eutanasia, decidimos hacernos cargo del animal y buscarle una nueva familia una vez que hubiera superado todos sus problemas de salud.

Radiografía de contraste
Radiografía de contraste
Así, iniciamos el tratamiento de Pau con la sonda para que recuperara la normalidad en su actividad urinaria, expulsando los cálculos que obstruían las vías. Posteriormente, y a efectos de comprobar que no había infección de vejiga y descartar una posible comunicación entre este órgano y el recto, realizamos una radiografía de contraste (ver imagen) que, afortunadamente, desveló que se encontraba en buenas condiciones. No obstante, la obstrucción volvía a producirse, por lo que decidimos someter al pequeño Pau a una cistotomía, intervención quirúrgica mediante la cual se hace una incisión en la vejiga para limpiar la zona de cálculos y que finalizó con éxito.

Tras un tratamiento con antibióticos para combatir la infección que causó su malestar, hoy Pau tiene una larga y sana vida por delante y, además, una nueva familia, ya que una de las trabajadoras de la Clínica Pets no tardó en enamorarse de este precioso cachorro.

Para terminar, os dejamos algunos síntomas que podéis observar en vuestras mascotas y que pueden ser indicativas de infección de orina:

  • El animal orina con mayor frecuencia
  • Molestias al orinar (el perro orina poca cantidad y repetidamente, incluso en ocasiones dentro del hogar, y los machos pueden agacharse al hacerlo, en lugar de levantar la pata)
  • La orina puede aparecer teñida de sangre o turbia
  • Los cálculos urinarios producen pocos síntomas en las hembras, sin embargo, en los machos, las “piedras” urinarias pueden obstruir la uretra, que es estrecha. En esta situación el perro hace esfuerzos por orinar sin conseguirlo y debe ser tratado con extrema urgencia
  • Si los riñones están afectados, el animal beberá y orinará mucho más de lo normal, y puede arquear la espalda por el dolor. La orina teñida de sangre o turbia puede ser más evidente.
 

Clínica Veterinaria Pets 

Tlf: 950 14 34 56